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martes, 24 de marzo de 2009

Curso de Animadores en Juvam Bogotá


(La victoria se está labrando, se ha dado un paso pequeño pero muy importante para llegar a ella)

En días pasados (14 y 15 de marzo) se ha llevado a cabo el tercer nivel del curso de animadores que propone el Movimiento Juvenil Amigoniano para los jóvenes que pertenecen a la regional Bogotá.

La temática del curso, que a mi consideración fue muy pertinente para ser aplicada en las comunidades juveniles, fue la siguiente:
  1. Importancia del proceso de formación
  2. Fundamentos, principios y criterios del trabajo en comunidades juveniles
  3. Etapas y niveles de crecimiento en la C. J. A.
  4. Focos del Crecimiento Integral:Personal y Comunitario (el cual tuve el gusto de dirigir)
  5. Ruta Amigoniana de Formación
  6. Método Amigoniano de Formación(M.A.F.)

¿Quiénes asistieron? En general, se vieron caras nuevas en este curso. Hicieron presencia las delegaciones de Madrid, los clubes Amigó, los centros de reeducación, y por supuesto, la cuota de experiencia por parte de las comunidades de La Chaparrita y del Colegio Seminario Espíritu Santo. Además de todos ellos, dirigimos la actividad el "jefe" de la Pastoral en Bogotá, Fray Juan Manuel Díaz, las hermanitas Valencia: Jenny y Jasmín, y quien les habla en este momento ;-)

En general, la dinámica de trabajo fue muy agradable. Los asistentes se mostraron siempre dispuestos a trabajar, colaborar y participar para que la actividad fuese más amena. Y esto se notó en un debate que armé especialmente para mi bloque donde muchos intervinieron sobre un conflicto presentado desde siempre en las Ciencias Sociales: ¿Qué es más importante: el individuo o el grupo? Y la verdad, los resultados fueron muy interesantes.

Se remató con una misa, donde se consagró a los participantes de este curso, haciéndoles entrega de un diploma y un CD con el material trabajado durante los dos días.

Ahh, y por cierto, hubo votación para elegir la Junta Regional de Bogotá, que debía ser conformada por cinco personas. Y también hubo votación para elegir al representante ante la Junta Nacional (Para mí que esto es como decir, el presidente de la Junta Regional). Bueno, ehhh, ummm, fui elegido como integrante de la Junta, y además como el representante para la reunión que se llevará a cabo en Manizales el 18 y 19 de julio próximos.

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Bueno, ¡ya viene siendo hora de dejar la humildad! Implicitamente yo ya había dicho antes que quería estar en dicha reunión en Manizales, y gracias a Dios logré el apoyo necesario para lograr ese objetivo (Algo así como el porcentaje que un cardenal necesita obtener en un cónclave para ser elegido papa: 2/3 del total). Ya he dicho la razón miles de veces y para dar una pista a quienes no saben es el propósito por el que he venido escribiendo intensamente en este blog desde hace casi un año. (Para saber, ver artículos anteriores o dar clic en el link que está debajo del título del blog).

Por tanto, debo ser directo y concreto en lo que voy a decir. A quienes queden elegidos como representantes para la reunión en Manizales les anticipo: Yo voy a ir por la presidencia de la Junta Nacional de Juvam. Tengo razones y tengo propuestas. Lo que antes no tenía, ahora lo tengo y teniendo en cuenta que queda mucho camino por recorrer antes de llegar a julio, de aquí hasta allá puedo recolectar mucho más cosas aún. Esperen en mí alguien que quiere el bien del movimiento por mis contribuciones, pero también esperen a una persona que quiere Liderar los procesos que se lleven a cabo.

Por último, esperen muy pronto un artículo que será la síntesis de la idea que quiero promocionar a nivel de los movimientos juveniles católicos. A este artículo le pondré por título "El Manifiesto Asociacionista"

sábado, 7 de marzo de 2009

La Importancia de la Oratoria

Una de las cosas que admiro en el Movimiento Juvenil Lasallista Indivisa Manent es la importancia que se le da a la palabra como medio importante e indispensable para transmitir una idea. Por algo, tanto en mi escuela local de 2006 como en la Escuela de Animadores de Villavicencio en 2007 el elemento de la oratoria fue muy trabajado.

¿Qué es un animador juvenil sin oratoria? Podrá tener experiencia en campamentos, encuentros; podrá conocer muchas personas de comunidades, colegios distintos; podrá tener muchos conocimientos filosóficos, teológicos, cristianos. Pero si el animador no puede manejar su capacidad de hablar, convencer, persuadir, impactar y conmover a sus compañeros, está echando a perder todo ese capital social y cultural que tiene en su poder.

Recientemente estuve en un taller de expresión oral y corporal organizado en mi universidad, en el que me di cuenta de muchos de mis errores al hablar, al tiempo que aprendí muchas técnicas para lograr el dominio de un auditorio. Muchas de estas cosas las aprendí con los hermanos en su debido tiempo, pero una vez tomé el taller me di cuenta de la gran importancia que tienen estos temas en la labor del animador.

Los lasallistas hemos entendido esto muy bien, y por algo nos hemos tomado en serio aquello de la "sexta punta" de la estrella que nos representa: Si las otras 5 puntas representan fe, fraternidad, servicio, justicia y compromiso, esa otra punta ¿qué es? Por supuesto, ¡La improvisación! No tomada a mal (Hacer las cosas en el último momento) sino a bien (Tener creatividad para hacer algo cuando no queda nada más que hacer). La capacidad de improvisar deber estar arraigada en un animador tan profundamente que debe usarla como herramienta cuando la necesite. Igual, el animador debe usar todos los medios para persuadir a su comunidad sobre un mensaje de vida, si quiere que definitivamente todos terminen reflexionando sobre aquello que les han dicho.

¿A qué llego con esto? En los próximos días comenzarán los cursos de animadores de la Juventud Amigoniana, y pues noto con preocupación que en cursos anteriores sólo se manejan temáticas teóricas en cuanto a cómo organizar una sesión, los temas de trabajo o la espiritualidad. Esto es muy importante pero ¿Por qué no darle cabida a cosas más prácticas? Que los participantes del curso puedan tener una experiencia para que ellos mismos sean los que reflexionen y que cuando lleguen a sus comunidades lo puedan transmitir. ¿Cómo? Para eso está la oratoria, y si no se maneja este tema en los cursos de animadores de JUVAM, ¡Vamos por mal camino!